Reunión de La Granja, Valsaín (Segovia)
24, 25 y 26 de junio de 1977
En junio de 1977, 34 asociaciones de defensa de la naturaleza se reúnen en La Granja (Segovia) convocadas por AEPDEN.
Acuerdos de La Granja
1. Demografía
Considerando que la superficie de la tierra, y más aún la susceptible de producir alimentos, es limitada, el crecimiento ilimitado de la población es suicida.
Por tanto, y para conseguir el equilibrio entre alimentos y población, se propugna una regulación social de la natalidad. Recusamos, sin embargo, la repercusión demográfica del Tercer Mundo llevada a cabo por los países que, pese a tener tasas de natalidad bajas, consumen más recursos que la mayoría de la población india. Para ello propugnamos: educación sexual, libertad de anticoncepción y modificación de la política gubernamental sobre desarrollo de la familia.
2. Recursos
a) No renovables. El crecimiento económico indefinido es imposible, el actual grado de conocimiento, único con base racional, nos permite presumir un agotamiento a plazo fijo de algunas materias primas básicas, de seguir el caótico expolio y el mercado desigual de éstas, en beneficio de los países, regiones y grupos sociales dominantes.
Hay que lograr el fin del despilfarro, el urgente y técnicamente posible reciclaje, el aprovechamiento civil de subproductos y defender el proceso de desaparición del suelo agriamente aprovechable.
b) Renovables. Sólo cabe confiar para el futuro de nuestra especie en los recursos naturales renovables; por tanto, resulta de la mayor importancia potenciar al máximo la investigación y la tecnología encaminada a la explotación de los mismos (energía, agricultura biológica y tecnologías alternativas en general).
La conservación a ultranza de las mayores porciones de ecosistemas naturales no degradados y humanizados estables.
Consideramos básica la defensa a ultranza de los restos de los ecosistemas naturales y de los humanizados estables, no sólo como objetivo de esparcimiento y cultura (visión justa pero excesivamente antropocéntrica), sino como irreemplazable patrimonio de cara a los ciclos de la materia y la energía y a la reserva genética de la biosfera. Así mismo propugnamos la conservación del patrimonio histórico, artístico, cultural y etnológico, como componentes del legado de la Humanidad que nos permita a nosotros y a las generaciones futuras asimilar creadoramente las experiencias culturales de la especie.
Consideramos la fuerza de trabajo como un recurso que debe prevalecer en la producción frente a los del capital inorgánico, tanto en las actividades de fijación y obtención de energías primarias (actividades agropecuarias, forestales y pesqueras) como en la transformación de materias primas. Propugnamos el empleo prioritario del trabajo humano (debidamente dignificado) frente a las grandes inversiones de capital y maquinaria, eliminando el paro.
Revindicamos el aire, el agua y el suelo como patrimonio de los pueblos y no como vertedero gratuito a través del que personas y entidades cargan a la sociedad para obtener mayores beneficios.
Consideramos aceptable, en principio, la máxima “quien contamina, paga”, pero no como justificación para seguir contaminando. Los costes de la descontaminación deberán ser deducidos de los beneficios de las empresas y no de aumento de precios al consumidor, ni de incremento de la plusvalía extraída del trabajador.
3. Hábitat
La degradación de los hábitats urbanos y rurales (masificación y desertización) son consecuencia del mismo proceso: la localización de la población en los ámbitos geográficos que propician la obtención de masas de trabajo y consumo allí donde beneficia los sistemas socioeconómicos imperantes.
La emigración del campesino, forzada por la ausencia de medios de vida dignos, ha provocado el desequilibrio entre regiones, estados y entre el campo y la ciudad en cada uno de ellos.
Nuestras grandes ciudades han dejado de ser un lugar al servicio del hombre, para convertirse en algo que oprime al que vive en ella y genera presiones inaceptables sobre el medio, no sólo el circundante, sino en ocasiones de otras regiones, incluso Estados.
La presión sufrida por los habitantes del medio urbano origina el consumo y privatización de áreas con calidad ambiental, fundamentalmente por las minorías con mayores recursos económicos y con traslación de formas de vida degradantes del medio rural, a nivel físico y sociológico.
Por ello propugnamos: el freno al crecimiento de las grandes áreas metropolitanas mediante la potenciación de los asentamientos medios y rurales. El desarrollo de la economía agraria, la descentralización de los centros de producción secundarios y terciarios y de las infraestructuras y equipamientos.
Socialización del suelo.
4. Modos de vida
a) La consecución de los objetivos de tipo físico tiene como medio y destino el cambio ético y sociocultural de nuestra sociedad, rompiendo de entrada el chantaje a que nos vemos sometidos por las estructuras imperantes que intentan plantear el dilema entre desarrollo y conservación.
El fin del consumismo, de la competitividad agresiva, de la prisa, de la incuria hacia personas y cosas, del machismo y del militarismo, forman parte del desarrollo (y no siempre crecimiento) social que preconizamos en paz con nuestros congéneres y nuestro nicho ecológico.
b) La educación aparece como una de las facetas primordiales: se debe conseguir la eliminación de la división entre trabajo manual e intelectual como único medio para lograr el adecuado conocimiento de lo que nos rodea y, simultaneando la posibilidad de transformar conscientemente el mundo y transformarnos nosotros mismos.
El fin de la enseñanza teórica y alóctona, alejada de la realidad humana, material y geográfica que nos rodea y la desmitificación y popularización de la ciencia y la técnica parecen condiciones coadyuvantes e indispensables para acabar con las nefastas tecnocracias, sean del color que sean.
c) La medicina preventiva y ambiental (restricción de la quimioterapia, freno al desarrollismo de la medicina “industrial”, alimentación no adulterada, personalización real de las curas, etc.) es básica en un nuevo tipo de salud. Constituye un factor del proceso en el cual, y mediante el establecimiento de una auténtica comunicación entre las personas y de éstas con las cosas, el hombre asuma psicosomáticamente sus limitaciones naturales y no discrimine ninguna de ellas (locos, subnormales, minusválidos).
Grupos participantes
– ADELPHA – Asociación de Defensa Ecológica y del Patrimonio Histórico-Artístico.
– AEORMA – Asociación Española para la Ordenación del Territorio y del Medio Ambiente.
– AEPDEN – Asociación de Estudios y Protección de la Naturaleza.
– ANA – Amigos de la Naturaleza Asturiana.
– ANAO – Asociación de Naturalistas de Andalucía Oriental.
– ANDALUS – Asociación para la Defensa de la Naturaleza de Andalucía
– ANSE – Asociación de Naturalistas del Sureste Español.
– ARANZADI – Sociedad de Ciencias Naturales
– Asamblea para la Defensa de la Naturaleza de la Ribera de Navarra.
– ASCAN – Asociación Canaria para la Defensa de la Naturaleza.
– ASDEMAN – Asociación Salmantina para la Defensa del Medio Ambiente.
– ASELCA
– Asociación Española de Geografía. Cátedra de Geografía Física de la Universidad Complutense de Madrid.
– APDH – Asociación Pro Derechos Humanos.
– Averroes
– CAUN – Club de Amigos de la Unesco.
– COACINCA – Comisión de Afectados del Rio Cinca.
– Colegio de Ingenieros de Caminos
– Comisión de Medio Ambiente de ALBE-Región Centro (Asociación de Licenciados en Ciencias Biológicas).
– Comisión de Vecinos de Valsaín.
– Comisión Ecológica de la Comunidad Castellana.
– CRIS
– DALMA – Asociación Alcarreña para la Defensa del Medio Ambiente.
– DEIBA – Defensa de los Intereses del Bajo Aragón.
– DEIBATE – Defensa de los Intereses del Bajo Aragón y Teruel.
– DEMA
– DEPANA – Liga para la Defensa del Patrimonio Natural.
– Departamento de Geografía. Universidad Autónoma de Madrid.
– El Rañaco. Valdecaballeros.
– FEDAS
– Federación Castellana de Montañismo.
– GATO – Grupo Abierto de Ordenación Territorial.
– Grupo de Estudios BELAGUA.
– La Vereda.
